jueves, 20 de noviembre de 2008

Atrapada en la realidad

Ahora que ha vuelto a llover por dentro, estoy más sola que nunca

Día tras día la vida duele un poco más de la cuenta. El temporal sigue avanzando, con su paso incesable, dejándome sin paredes bajo las que protegerme. Jugué mal mis pocas cartas, y volví a sentarme a solas con la decepción. Duele el silencio cuando todo lo que necesitas es un fuerte abrazo que te haga sentir que la lucha es compartida. Duelen las circunstancias cuando se retuercen ante tus ideales que te han alimentado ante la negación de la realidad. Duele ver tanta resignación ante la incapacidad de ser feliz. Duele ver que la cruda existencia siempre tiene la última palabra.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

No va a volver a llover porque yo te protejo con mi paraguas...

:)

...

Anónimo dijo...

¿Cuál es la justa intensidad del dolor?
¿Tiene que existir el dolor? ¿Es justo?
¿El dolor es sinónimo de vida?
¿Por qué la soledad y el dolor van unidos?
O más bien ¿Cuándo sentimos dolor nos sentimos solos?
¿La soledad produce dolor o el dolor soledad?

La vida no es sinónimo de dolor, pero cuando te toque sentirlo, duele menos en compañía. Cobíjate bajo ese paraguas y no dejes que nada ni nadie diga la última palabra. Hazlo tú.
Después de la tormenta siempre viene la calma y con un poco de suerte saldrá un arco iris brillante que te hará sonreír.
Si a pesar de todo te sigue doliendo, yo siempre tengo aspirinas.

asturianina dijo...

Hola, ta guapo lo que escribiste, a mí también me gusta escribir, y aunque estos díasno l ohe hecho, leer lo que has escrito, me ha hecho sentirmme identificada con el texto, ta bonito, triste, pero bonito. Es una lástima que para sacar buenas palabras haya que sentirse así,no? Pero mu chulo de verdad

asturianina dijo...

Oye, me gustaría poder hablar contigo. He estado ahí mirando unos cuantos textos(leer todos me es imposible, son mogollón, jeje, pero poquito a poco, están interesantes...),y me ha parecido algo extraño el encontrar sin haberlo buscado, encontrar tu blog y, ver que no soy la única que tiene pensamientos como los que leí....y esos sentimientos también...
Te dejo mi mail:
rodillasmalas@gmail.com